La logopedia en la escuela infantil por María Muñoz.

Blog Smile - Educación Infantil

El lenguaje oral está presente en la comunicación de las personas desde el nacimiento. La familia y el entorno más cercano serán muy importantes a la hora de proporcionar las primeras experiencias para que el lenguaje se desarrolle de forma adecuada.

En el desarrollo del lenguaje expresivo del niño son fundamentales algunos aspectos biológicos. Estos son:

– La audición, siendo necesario descartar cualquier tipo de trastorno auditivo.

– La articulación, siendo necesario una adecuada formación y tono del aparato fonador.

– Funciones neuropsicológicas como la función intelectual, la memoria y la praxia constructiva.

    Aspectos sociales.

El desarrollo del lenguaje forma parte del desarrollo de la inteligencia y puede depender del entorno social y emocional del niño. El niño aprende a hablar porque está con gente que habla con él desde que nace o incluso desde antes.

Para un buen desarrollo del lenguaje es necesario que la madre, el padre, hermanos, escuela infantil, etc.”hablen” con el niño.

Uno de los trastornos más frecuentes que podemos tener las personas en la infancia son los relacionados con la audición, sobre todo con entender. Es de vital importancia visitar al logopeda cuando se detecte algún tipo de problema antes de que pueda derivar más tarde  a otras patologías como dislexia, dislalia, disfemia…

En la escuela infantil, la figura del logopeda tiene un importante papel en el desarrollo del lenguaje. El servicio de logopedia de nuestra escuela, junto con las psicólogas, fisioterapeuta y seños se encarga de la prevención, evaluación y apoyo a los alumnos que presentan dificultades relacionadas con la comunicación.

Nuestro objetivo es que el niño continúe adquiriendo de la forma más adecuada el lenguaje oral y comprensivo en todas sus dimensiones: forma, contenido y uso.

La intervención del servicio de logopedia en la escuela es fundamental para:

-Poder intervenir en dificultades como retraso del lenguaje, deglución atípica, expresión oral…

-Estimular el desarrollo del lenguaje favoreciendo la compresión y expresión.

-Observar y analizar la causa del problema (dificultad para hablar, falta de fluidez…) y poder iniciar un tratamiento.

-Favorecer o corregir sus procesos fonéticos y fonológicos según edad.

-Guiar a los miembros de la familia en cómo estimular al pequeño.

-Seguir muy de cerca la evolución de cada niño (tanto en sesión individual, como en el aula, patio…).

-Trabajar en coordinación con el resto de profesionales del centro y así entre todos obtener una evolución más acertada y buena para el niño.

Para conseguir todos estos objetivos es necesario crear un clima de confianza y que mejor lugar que la propia escuela del pequeño.

¿Tan importante es que un niño de 3 años este adquiriendo un buen desarrollo del lenguaje?

Esta pregunta es la que se hacen muchos padres y aquí viene el típico consejo cuando un niño de 2 años aun no emite ninguna palabra: “ya hablará” o “es pequeño aún”.

Este es un error muy frecuente que perjudica a nuestro niños, si a los 18-24 meses el niño tiene un retraso notable en el lenguaje hay que estudiar a qué se debe y comenzar un tratamiento con él. Puede tratarse de un simple retraso del lenguaje que en poco tiempo ha superado o un futuro trastorno del lenguaje y en ambos casos es necesaria  una intervención temprana   para evitar complicaciones futuras ya que a medida que van creciendo, las dificultades a las que se enfrentan los niños son cada vez mayores y pueden afectar no solo a la comunicación sino al desarrollo emocional, al aprendizaje escolar y a la socialización.

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